Por Carlos Lopez
El mundo de fútbol viene siendo efímera para varias figuras que añoran los excesos del capitalismo. Algo así como Filiberto Macario Reyes, personaje del cuento El Rayo Macoy, escrito por el mexicano Rafael Ramírez Heredia. En donde se habla de un boxeador mexicano que llega a ser conocido internacionalmente: la estrella que viene de los estratos bajos, gana millones y termina en la ruina.
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En este caso dicho imaginario se ha encontrado con algunos futbolistas. Sin embargo no por ello se les ha restregado una moral conservadora en donde el trabajo duro y el ahorro será garantías para el éxito. Aquí sólo hablaremos de un hombre común que promueve valores que son genuinamente dignos para cualquier ser humano: la lealtad, el amor y la solidaridad. Pues nos referimos a un futbolista que se ganó el corazón de la afición de Chivas: Jesús Sánchez. Y es que en la página oficial revelan que su primer sueldo fue destinado a su familia en un 50 por ciento.
"Cuando Chivas le dio su primer sueldo, decidió dividirlo a la mitad; una parte se la mandó a sus papás y la otra la conservó él. Con los siguientes pagos, comenzó a arreglar la casa de su familia en Sonora." comentan en la página oficial. Siendo honestos, aquí es el punto en donde podemos hablar de una figura ejemplar. Más allá del aspiracionismo que luego se nos quiere vender con las estrellas del fútbol.
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Sánchez anunció su retiro y por ende llegaron los miles de datos curiosos. Así como un repaso a lo que fue su carrera. Y es que el ver a un hombre que pasa por un sólo equipo en toda su carrera es algo extraño en nuestros días. No por nada la magia romántica de Francesco Totti cautiva a varios aficionados. Y sin afán de comparar a dichos futbolistas. Podemos que decir que la virtud de Sánchez fue el de la discreción.
08/11/2024
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